Cuando el mejor clima se acerca al hemisferio boreal, la temporada de tenis empieza a virar hacia unos torneos que se juegan bajo el sol y encima de una superficie muy querida por algunos tipos de atletas, es decir la de tierra batida.
La temporada de las competiciones en arcilla se está acercando y con ella varios elementos que aman este tipo de torneos se prepara de manera concreta para poder rendir de la mejor manera. Rafael Nadal, el que más se ha exhibido en estos torneos, espera cada año este momento para poder marcar la diferencia, y este año que es el número 2 del ranking ATP espera poder aprovechar de este periodo para adelantar a Novak Djokovic, número 1 después de haber ganado los últimos tres Grand Slam en juego, una auténtica hazaña. En este contexto, el torneo más importante de los que se juegan sobre arcilla es sin duda el Abierto de Francia, también conocido como Roland Garros.
La edición de este año será la número 118 y se jugará en las afueras de París del 26 de mayo al 9 de junio, día de la final del torneo masculino. Con todavía muchos torneos de por medio y una serie de imprevistos que podrían modificar la parrilla de salida de esta competición, es también cierto que ya se pueden ir haciendo predicciones sobre los que tendrán el favor de los pronósticos: según los analistas de Bwin Rafa Nadal es el gran favorito.
El papel del tenista balear, que ha ganado este torneo en 11 ocasiones, récord absoluto para un torneo del Grand Slam, es el de absoluto dominador de esta competición. Nacido y crecido en campos de arcilla, el mallorquín sabe hacer valer su juego de piernas y su dinamismo en esta superficie, que le requiere menos esfuerzo físico ya que la pelota no va tan rápido como en los campos de hormigón o de hierba. Pese a haber mejorado mucho en otras superficies, Nadal sigue encontrándose más a gusto en los terrenos de arcilla, en los que puede dar alarde de todo su talento y sobre todo de su increíble movilidad y resistencia al cansancio.
Sin embargo, para el español no será tan fácil ganar su duodécimo Roland Garros. Eso porque Novak Djokovic, pese a no ser favorito como él en este tipo de superficie, está con ganas de seguir dominando el circuito ATP, como lleva haciendo desde hace meses. El serbio ha conseguido triunfar en los últimos torneos de Wimbledon, Flushing Meadows y Australian Open, es decir que si lograra ganar en París establecería un récord jamás registrado, el de ganar 4 Slam de seguido. Pero el número 1 del ranking no es el único rival de Nadal. Además de él están el austriaco Dominic Thiem y Roger Federer, que en este tipo de competiciones nunca se puede dar por muerto. El espectáculo de París ya promete mucho, a tres meses de su comienzo.